Jorge Rodríguez – Revista Lombriz. Con la participación de más de 500 productores de los distritos de Mazamari, Río Tambo, Pangoa y Vizcatán del Ene, en la región Junín, el Proyecto Especial de Desarrollo del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (ProVraem) lanzó oficialmente los proyectos “Cacao Fino de Aroma” y “Cafés Especiales”. De este modo, estas iniciativas buscan fortalecer la cadena de valor en café y cacao, elevar la calidad de los productos y mejorar la vida de millas de familias agrícolas en la zona.

AGRICULTURA DE CALIDAD

El proyecto Cacao Fino de Aroma busca ofrecer asistencia técnica en todos los procesos: desde la producción y cosecha hasta la poscosecha y el valor agregado.

La inversión destinada a esta iniciativa es de aproximadamente S/25 millones, con el fin de promover un cacao premium que pueda competir en los mercados nacionales e internacionales.

Por otro lado, el proyecto Cafés Especiales se centra en el manejo agronómico sostenible, el aumento de la productividad y la implementación de tecnologías accesibles.

Su inversión ronda los S/27 millones, con el objetivo de que los caficultores puedan producir granos de alta calidad que destaquen en los mercados globales.

El enfoque de ambos proyectos es brindar conocimientos y herramientas modernas, que permitirán a los agricultores mejorar sus cultivos y obtener mejores precios, fortaleciendo así su economía y seguridad alimentaria.

SIMBOLISMO Y ESPERANZA.

El evento de lanzamiento estuvo cargado de simbolismo. Se realizó el tradicional “quiebre del cacao”, un acto que representa prosperidad y buenas cosechas para los productores. Además, los caficultores entregaron a las autoridades muestras de sus “granos de oro”, símbolo del arduo trabajo y la calidad que buscan posicionar en los mercados nacionales e internacionales.

El director ejecutivo de ProVraem, Rogelio Huamaní Carbajal, destacó el compromiso de impulsar la agricultura familiar con productos de alto valor. “Nuestro objetivo es generar oportunidades reales de desarrollo para los productores del Vraem, promoviendo prácticas sostenibles que beneficien a largo plazo a toda la comunidad”, afirmó.

Este impulso a las cadenas productivas busca transformar la realidad de las comunidades agrícolas del Vraem, garantizando una economía más sólida y una mayor presencia de productos peruanos en los mercados externos, con el respaldo del Estado y la cooperación técnica.